Marv Albert Citas famosas

Última actualización : 5 de septiembre de 2024

other language: spanish | czech | german | french | italian | slovak | turkish | ukrainian | dutch | russian | portuguese

Marv Albert
  • Nunca les gritaría a mis hijos, nunca levantaría la voz. Pero como a menudo me dicen, se portaban tan bien que gritar no era necesario.

  • Si Justin Beiber midiera 7 pies de altura, se parecería a [Meyers Leonard] eso.

  • Para mí, hacer los Juegos Olímpicos de 1992 en Barcelona para NBC, solo ver al Dream Team tomar la palabra, fue una emoción para mí. No creo que hubiera otro equipo en ningún deporte con ese alto nivel de atletas jugando juntos.

  • Hay gente en Nueva York que siente que debería tener un enfoque más de ciudad natal. Siento que tenemos que ser un espejo y reflejar lo que sucede en la cancha.

  • Las llamadas de juegos no pueden ser justas, oh, por cierto, como parte de una discusión más amplia.

  • Yo era fanático de los Knicks de la vieja escuela de Kenny Sears-Carl Braun-Jim Baecht. Incluso fui su chico de pelota cuando era adolescente.

  • Mi juego en la cancha fue normal. Tenía un jersey pero necesitaba pantallas. Podría ir a la derecha, pero no a la izquierda.

  • En 1957, yo era un oficinista de 16 años de los Dodgers.

  • Mi juego fuerte era el ping pong. Implacable... estable.

  • En la radio, tú eres el juego, por así decirlo, tienes que describir todos los aspectos. En televisión, siempre he sentido que menos es más, y en realidad se trata de configurar el analista de color más que cualquier otra cosa.

  • Hay una delgada línea entre la pelota física y la de los matones, y los Knicks la han cruzado en ocasiones.

  • Steve Kerr, ahora entrenador de Golden State después de ocho años tumultuosos y muy inconsistentes en TNT.

  • Es imposible trabajar en condiciones en las que confundieron negatividad con objetividad. No puedes engañar a los fanáticos.

  • Phil Jackson pelearía con sus propios jugadores en la práctica.

  • La explosiÃ3n de tres puntos de Michael Jordan, de los Chicago Bulls, en el juego 1 de las Finales de la NBA de 1992 contra Portland es fà ¡cilmente una de las mejores actuaciones que he visto. Mientras hacía su sexto consecutivo, nos guiñó un ojo directamente a Mike (compañero de transmisión) (Fratello) y a mí y levantó las palmas de las manos encogiéndose de hombros, como diciendo: ¿Qué puedo hacer?