Marguerite Yourcenar Citas famosas

Sabía que lo bueno como lo malo se convierte en rutina, que lo temporal tiende a perdurar, que lo externo impregna lo interno y que la máscara, con el tiempo, llega a ser el rostro mismo.

nada es más lento que el verdadero nacimiento de un hombre

El verdadero lugar de nacimiento es aquel en el que por primera vez uno se mira inteligentemente a sí mismo; mis primeras patrias han sido los libros y, en menor grado, las escuelas.

Un toque de locura es, creo, casi siempre necesario para construir un destino.

Dejar libros es aún más hermoso â€" Hay demasiados niños.

El amor es un castigo. Somos castigados por no haber sido lo suficientemente fuertes como para permanecer solos.

La máscara, con el tiempo, viene a ser el rostro mismo

Todo resulta ser valioso que uno hace por sí mismo sin pensar en ganancias.

El paisaje de mis días parece estar compuesto, como regiones montañosas, de materiales variados amontonados pell-mell. Allí veo mi naturaleza, compuesta en sí misma, compuesta a partes iguales de instinto y entrenamiento. Aquí y allá sobresalen los picos de granito de lo inevitable, pero todo se trata de escombros de los deslizamientos de tierra del azar.

Toda felicidad es una obra de arte: el más mínimo error la falsifica, la más mínima vacilación la altera, la menor pesadez la estropea, la más mínima estupidez la embrutece.

No me confundas. Todavía no soy lo suficientemente débil como para ceder a las imaginaciones temerosas, que son casi tan absurdas como las ilusiones de esperanza, y ciertamente son más difíciles de soportar. Si tengo que engañarme a mí mismo, preferiría mantenerme del lado de la confianza, porque allí no perderé más y sufriré menos.

Alma pequeña, gentil y a la deriva, huésped y compañera de mi cuerpo, ahora habitarás abajo en lugares pálidos, austeros y desnudos; allí abandonarás tu juego de antaño. Pero aún un momento, contemplemos juntos estas costas familiares, estos objetos que sin duda no volveremos a ver....Intentemos, si podemos, entrar en la muerte con los ojos abiertos...

Nunca he sazonado una verdad con la salsa de una mentira para digerirla más fácilmente

La meditación sobre la muerte no le enseña a uno cómo morir; no hace que la partida sea más fácil, pero la tranquilidad no es lo que busco. Amado muchacho, tan voluntarioso y melancólico, tu sacrificio no habrá enriquecido mi vida sino mi muerte. ... Siglos aún por nacer dentro de la oscura matriz del tiempo pasarían por miles sobre esa tumba sin restaurarle la vida, pero igualmente sin aumentar su muerte y sin cambiar el hecho de que él había sido.

Había llegado a ese momento de la vida, diferente para cada uno de nosotros, en que un hombre se abandona a su demonio o a su genio, siguiendo una misteriosa ley que le ordena destruirse o superarse a sí mismo.

Y, sin embargo, he amado a algunos de mis maestros, y esas relaciones extrañamente íntimas aunque esquivas que existen entre alumno y maestro, y las Sirenas cantando en algún lugar dentro de la voz entrecortada de quien es el primero en revelar una nueva idea. El mayor seductor no fue Alcibíades, después de todo, fue Sócrates.

Hay libros que uno no debería intentar antes de haber cumplido los cuarenta años.

Nuestro verdadero lugar de nacimiento es aquel en el que nos echamos por primera vez una mirada inteligente sobre nosotros mismos. Mis primeras patrias fueron mis libros.

La memoria de la mayoría de los hombres es un cementerio abandonado donde yacen, sin ser reconocidos y honrados, los muertos a quienes han dejado de apreciar. Cualquier pena duradera es un reproche a su negligencia.

Nuestro gran error es tratar de exigir de cada persona virtudes que no posee, y descuidar el cultivo de las que tiene.

La técnica de un gran seductor requiere una facilidad y una indiferencia para pasar de un objeto de afecto a otro que nunca podría tener; sea como fuere, mis amores me han abandonado más a menudo de lo que yo los he abandonado, porque nunca he sido capaz de entender cómo se puede tener suficiente de un amado. El deseo de contar exactamente las riquezas que cada nuevo amor nos trae, y verlo cambiar, y quizás verlo envejecer, concuerda mal con la multiplicidad de conquistas.

No creo que alguna vez renuncie a una persona que he conocido, y seguramente no a mis personajes de ficción. Los veo, los escucho, con una claridad que llamaría alucinatoria si la alucinación no significara otra cosa ... Un personaje que creamos nunca puede morir, como tampoco puede morir un amigo ... A través de [mis personajes] he vivido muchas vidas paralelas.

El mundo es grande … Que le plazca a Quien tal vez sea expandir el corazón humano a la medida completa de la vida.

La crueldad es el lujo de quienes no tienen nada que hacer, como las drogas o las carreras de caballos.

Dado que el hombre, fragmento del universo, se rige por las mismas leyes que presiden los cielos, de ninguna manera es absurdo buscar allí arriba los temas de nuestras vidas, esas frígidas simpatías que participan tanto de nuestros logros como de nuestros errores.

Los hombres que se preocupan apasionadamente por las mujeres se apegan al menos tanto al templo y a los accesorios del culto como a su diosa misma.

En general, sin embargo, es solo por orgullo o gran ignorancia, o cobardía, que nos negamos a ver en el presente los lineamientos de los tiempos venideros.

La enfermedad nos repugna con la muerte, y deseamos ponernos bien, que es una forma de desear vivir. Pero la debilidad y el sufrimiento, con múltiples males corporales, pronto desalientan al inválido de intentar recuperar terreno: se cansa de esos respiros que no son más que trampas, de esa fuerza vacilante, esos ardores interrumpidos y esa perpetua espera del próximo ataque.

Cada vida está marcada por muertes y partidas, y cada una causa un gran sufrimiento que es mejor soportar en lugar de renunciar al placer de haber conocido a la persona que falleció. De alguna manera, nuestro mundo se reconstruye a sí mismo después de cada muerte y, en cualquier caso, sabemos que ninguno de nosotros durará para siempre. Entonces, podrías decir que la vida y la muerte nos llevan de la mano, con firmeza pero con ternura.

Decimos: loco de alegría. Deberíamos decir: sabio con el dolor.

Nadie entiende la eternidad. Uno simplemente reconoce su existencia.

Todo está demasiado lejos en el pasado, o misteriosamente demasiado cerca.

la edad no significa nada. En todo caso, siento que todavía soy un niño: la eternidad y la infancia son mis edades.

El niño estadounidense, conducido a la escuela en autobús y estupefacto por la televisión, está perdiendo contacto con la realidad. Existe una enorme brecha entre el gran peso de los libros de texto que lleva a casa desde la escuela y su capacidad para interpretar lo que contienen.

Cualquier verdad crea un escándalo.

Pero la felicidad es frágil, y si los hombres y las circunstancias no la destruyen, está amenazada por fantasmas.

No estoy seguro de que el descubrimiento del amor sea necesariamente más exquisito que el descubrimiento de la poesía.

Un joven músico toca escalas en su habitación y solo aburre a su familia. Un escritor principiante, por otro lado, a veces tiene la desgracia de publicar.

Quedarse en un lugar y ver cómo van y vienen las estaciones equivale a viajar constantemente: Uno está viajando con la tierra.

Las leyes cambian más lentamente que la costumbre, y aunque son peligrosas cuando se retrasan, los tiempos son más peligrosos aún cuando presumen de anticipar la costumbre.

Cuando dos textos, o dos afirmaciones, quizás dos ideas, estén en contradicción, prepárese para reconciliarlas en lugar de anularlas una por la otra; considérelas como dos facetas diferentes, o dos etapas sucesivas, de la misma realidad, una realidad convincentemente humana solo porque es demasiado compleja.

Todo lo que hacemos afecta nuestro destino para bien o para mal. Las circunstancias en las que nacemos también ejercen una tremenda influencia; venimos al mundo con débitos y créditos de los que no somos responsables ya contabilizados en nuestra cuenta: esto nos enseña humildad.

La pasión como la suya es todo consentimiento, pidiendo poco a cambio. Simplemente tuve que entrar a una habitación donde ella estaba para ver su rostro asumir esa expresión pacífica de alguien que está descansando en la cama. Si la tocaba, tenía la impresión de que toda la sangre en sus venas se estaba convirtiendo en miel.

Esta ciudad pertenece a fantasmas, asesinos, sonámbulos. ¿Dónde estás, en qué cama, en qué sueño?

Si amas la vida, también amas el pasado, porque es el presente, ya que ha sobrevivido en la memoria."Traducción de David Downie

De todos nuestros juegos, el juego del amor es el único que amenaza con perturbar el alma...

La FundaciÃ3n de bibliotecas fue como construir mà ¡s graneros públicos, acumulando reservas contra un invierno espiritual que por ciertos signos, a pesar de mà mismo, veo anticipado…

Un ser inflamado de vida no puede prever la muerte; de hecho, con cada una de sus acciones niega que la muerte exista.

Uno lee miles de libros, de poetas, modernos y antiguos, mientras conoce a miles de personas. Lo que queda de todo es difícil de decir.

Los libros no son vida, solo sus cenizas.